Renovación

Poco después de finalizado el encuentro, con el sabor amargo todavía, Pedro explicó con claridad lo que había sucedido. Tal vez para ser fieles a nuestra historia y bautizar la casaca, el sábado nos comimos un estreno de camiseta acompañado de una riquísima ensalada de derrota. El chef fue el destacado árbitro canoso que una vez hubiéramos informado, y que ratificó su mal desempeño, a pesar de que todavía un poco lo queremos por razones desconocidas, tal vez su aspecto bonachón.
De todas maneras la jornada fue una fiesta, como cada sábado ganemos o perdamos, los pibes disfrutaron de la indumentaria corriendo y pateando.

 

 Pura felicidad, eso somos.

 Los capitanes del equipo, brutalizados previo al cotejo. Miedo. Claudito se divierte con su mano de goma y parece que  posara abrazado a un amigo imaginario. Nada importa, cada uno hace lo que le parece.

Al Negro le colocaron dos piernas de aluminio y se acercó para acompañar al equipo desde el borde de la cancha. Bienvenido de nuevo Negro. Ratificó que a fines de 2038 estaría para volver, tiene su camiseta 14 reservada, ya la hicimos bendecir por el padre Ignacio de Rosario.
Un agradecimiento especial a la gente de banco Macro por apoyarnos en esta nueva etapa.

Sueña el Sordo

Banda querida... En vísperas del torneo que arranca y con toda la ansiedad en nuestros cuerpos que piden pelota y pasto, me dispongo a compartir un sueño que tuve en las vacaciones de verano, específicamente el 12 de enero de 2015 en las tierras chilenas de Pucón... Mientras piloteaba el gol-flecha de plata-total hacia no sé dónde, le pedí a Lechuga que lo trascribiera porque me volvió bastante loquito -cual cuento de Sacheri en carne propia-; más aún, recuerdo que esa mañana me había interrumpido el sueño desde las 6 en adelante...
La cosa fue así: Gran triunfo del Sordo sobre "Vamo` Hacelo" 3-2. No recuerdo dos goles, sí que en uno de ellos contamos con la ayuda del arquero que se le fue por abajo de las patas, tras remate débil de Clau (llegué a la conclusión de que era él, porque era bien alto el que pateaba).-
Lo llamativo y, sin dudas, sideral del sueño, es que en el rival jugaba Cristiano Ronaldo. Los dos goles de ellos los hizo él; el segundo de tiro libre, golazo.-
Perdíamos 1-0, también con un bombazo de Cristiano al primer palo del arquero  (no recuerdo quién era), que esperaba el centro. Lo empatamos y después nos pusimos 3-1, con mucho huevo. Faltando quince o veinte minutos, descontó Cristiano de tiro libre, animal.-
Cerca del final, se puso picante y se armó "tole-tole", porque el árbitro -que ya había dejado pasar fuerte falta de Cristiano cortando una contra nuestra- no cobró otra tremenda infracción del portugués poniéndole el brazo en la cara -tipo codazo- al Negrito Cerdá... En ese momento, nos fuimos varios al humo -Perro a la cabeza-, y recuerdo que le dije que si bien estaba peleando el balón de oro con Messi (y que posiblemente lo ganara), nunca iba a ser el mejor porque era un soberbio; y al toque agregué "acordate cómo gritaste el segundo gol".-
Cristiano no me dio ni bola y metió esa sonrisa que detestamos todos, hijo de puta... Termina el partido, mucha alegría y abrazos, Pepi me dice: "Esto viene bien, saqué muchas conclusiones...". Partidazo del Negro Cerdá. Curiosa zaga central: Chapa Iannini y Liso Damonte...
Abrazo cordialísimo y vamos sordo el lunes, a meter primera!!!